Los reactivos preparados eliminan la necesidad de medir químicos tóxicos y corrosivos. Sólo hay que añadir la muestra al vial, realizar la digestión y medir. Las mediciones fotométricas arrojan resultados exactos sin el equipamiento y el esfuerzo que exigen las titulaciones.
Los pequeños volúmenes de reactivos utilizados en los viales minimizan los residuos de plata, mercurio y cromo.